Los productores saben que mejorar la salud de su tierra puede incrementar el desempeño de sus cultivos. Sin embargo, no siempre está claro qué acciones se pueden tomar para ver resultados reales. Intente estas 9 estrategias para transformar la tierra de buena a excelente.
1. Comience con las bases
Primero que todo, observe que tan bien se mueve el agua por toda la tierra, dice el agrónomo de Farm Journal, Ken Ferrie. “Uno de los problemas más grandes que afecta la salud de la tierra suelen ser problemas de planeación, como capas compactas que impiden a las raíces y el movimiento del agua limitando la oxigenación de la tierra”.
2. Mantenga una raíz viva
“El suelo está vivo, en una cucharadita de tierra saludable hay más microorganismos que gente en el planeta”, dice Mitchell Hora, CEO de Continuum Ag. “Estos microorganismos necesitan alimento, lo que significa que necesitamos agregar más carbón y azúcares simples al suelo a través de la fotosíntesis”.
3. Un enfoque total
“Todo el campo, cada hectárea, trabaja en conjunto porque el ambiente funciona como uno”, dice Jamie Johnson, un productor en Frankfort, Dakota del Sur. “Tratamos de trabajarlo como un solo sistema.
Para ellos, esto significa incorporar otros tipos de agricultura en la operación, como el ganado para añadir nutrientes, materia orgánica y biodiversidad.[metaslider id=5544]
4. Agricultura de precisión
Prácticas de agricultura de precisión, como aplicaciones variables y zonas de manejo independientes, pueden ayudar a los productores a reducir costos y recursos al limitar aplicaciones de productos mientras se enfocan en mejorar la salud de la tierra.
5. Balancear el pH de la tierra
Las bacterias que descomponen la materia orgánica no funcionan bien en suelos altamente acídicos. La materia orgánica puede unir nutrientes importantes, incluyendo el nitrógeno. Un rango de pH entre 6 y 7 es óptimo para asegurarse que los nutrientes buenos estén disponibles para las plantas, aunque la mayoría de los campos pueden funcionar bien entre 5.5 y 6.5.
6. Centeno sin labranza antes de la soja
Los productores que buscan una manera sencilla de comenzar deben considerar el uso del centeno sin labranza como una cubierta de los campos en otoño antes de la soja de la siguiente temporada.[metaslider id=5512]
7. Disminuye el disturbio
Los productores que se enfoquen en la salud del campo deben limitar o disminuir los disturbios en el suelo, dice Hora.
“Si estás construyendo estas comunidades microscópicas pero luego destruyes su hogar sobre-aplicando fertilizantes, ¿qué beneficio estás consiguiendo?”
8. Planta, después quita el centeno
Antes de remover una cubierta como el centeno, espera a que empiece a soltar polen, o que el suelo se comience a secar después que la soja esté plantada y creciendo. Ahora es el momento de una sola aplicación de herbicida en un día donde no haya lluvia en el pronóstico.
“Esto ayuda a reducir esa primera aplicación de herbicida”, explica Hora.
9. Mantente en la ofensiva, no en la defensiva
“Normalmente las cubiertas del campo se han catalogado como herramientas de defensa, defensa ante la erosión y defensa contra los problemas en calidad del agua, pero realmente esta cubierta es mi herramienta a la ofensiva”, dice Hora. “Es mi estabilizador de nutrientes, mi programa de herbicida, es mi programa de manejo de humedad, es mi programa de construcción del suelo y es mi programa de resiliencia”.
Fuente: AgWeb
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