La pandemia de COVID-19 ha causado grandes estragos en la economía de Estados Unidos, y el estado de Texas (así como casi todos estados del país) ha registrado el mismo camino irregular, pues en el periodo de enero a marzo del 2020, el Producto Interno Bruto (PIB) del estado cayó un 2.5 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior, de acuerdo a la Oficina de Análisis Económico (BEA).
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Durante el primer trimestre EE. UU. presentó en promedio una pérdida de 5 por ciento del PIB, la oficina dio a conocer que el PIB real de los estados varió con 1.3 por ciento menos en Nebraska y 8.2 por ciento menos en Nueva York y Nevada.
Durante el segundo trimestre de 2020, de abril a junio, fue el período más difícil para la economía de EE. UU., debido a que su PIB cayó en un 31.4 por ciento y Texas vio caer su PIB en un 29 por ciento con respecto al trimestre anterior, una pérdida mayor fue la de Washington, D.C. con un 20.4 por ciento, pero mejor que la caída del 42,2 por ciento en Hawai y Nevada con respecto al trimestre anterior.
En este mismo periodo la industria restaurantera y hotelera disminuyó dramáticamente en 88.4 por ciento en todo el país, informó la BEA.
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Durante el tercer trimestre de 2020 se observó una gran recuperación generalizada en todo el país del PIB en promedio del 33.4 por ciento y un aumento en promedio del 29.7 por ciento en Texas en comparación con el trimestre anterior.
A medida que aumente la cadena de distribución de las vacunas contra COVID-19 la suerte de la industria restaurantera debería cambiar en los próximos meses, pero nadie sabe que
tan rápido se recuperará la economía.
Algunas empresas de productos agrícolas optaron por enfrentar los desafíos de la pandemia de la siguiente forma:
- Recorte de personal / licencia con goce de sueldo
- Aumento de ventas a los minoristas
- Recorte de artículos / SKU transportados
- Incremento de almacenamiento en frío
- Desvío de productos especiales a otros productos
- Comercialización de cajas de productos a los consumidores
Los operadores de productos agrícolas remarcaron como la confianza y lealtad de los clientes y el éxito que han tomado los productos recién cortados en el mercado minorista han sido de gran ayuda durante estos tiempos difíciles. También dijeron que la carga de cumplimiento aumenta debido a la supervisión y la regulación cada vez mayores.
Una vez que termine la pandemia, el negocio de convenciones y hoteles volverá a lo grande, dicen los operadores.
Fuente: The Packer
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