Los fruticultores chilenos están preocupados por el potencial de las medidas relacionadas con COVID-19 para interrumpir la cadena de suministro y el movimiento de trabajadores durante su temporada alta de cosecha.
Jorge Valenzuela, presidente de la Federación de Productores de Frutas de Chile (Fedefruta) dijo que la pandemia de COVID-19 ha reducido la disponibilidad de trabajadores temporales en regiones como Atacama, donde la cosecha de uva de mesa está aumentando, según un comunicado de prensa publicado el 4 de diciembre.
En la región de Copiapó, en el norte de Chile, algunos trabajadores agrícolas de Bolivia no han podido ingresar a Chile debido a la pandemia.
En las regiones productoras del centro y norte de Chile, la posibilidad de una segunda ola de COVID-19 en enero podría conducir a nuevas medidas de confinamiento para las ciudades y regiones de cultivo, amenazando con grandes dolores de cabeza a los productores.
El líder frutícola chileno dijo que el sector de productos frescos debe prestar mucha atención a los protocolos para evitar el COVID-19 tanto en los campos como en las plantas y en las rutas al mercado.
“Tenemos que prepararnos para correr un maratón, un maratón en términos de cumplir con los protocolos de salud”, dijo en el comunicado. “El desafío más importante que tenemos como productores y exportadores de frutas es evitar cualquier brote de COVID-19 en los huertos y por supuesto en las plantas de proceso”, dijo en el comunicado. “Hay que ser extremadamente estricto con el control de temperatura, con el uso de mascarillas, con el uso de gel de alcohol en todos los procesos, y poder rastrear si hay un caso positivo de coronavirus”.
Fuente: The Packer – Chilean growers look at “marathon” to beat COVID-19
