Las pérdidas en cosechas de todo el mundo por plagas y enfermedades equivalen al mismo porcentaje (30%) de alimentos producidos para el consumo humano en todo el mundo que se desperdician cada año, de acuerdo a datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). Estos datos ayudan a entender la dimensión del problema dentro de la industria.
Es por eso que las naciones han optado por el uso de la biotecnología. El desperdicio de alimentos, las plagas y las enfermedades del campo son problemas que se pueden enfrentar mediante el uso de la biotecnología y la innovación de mejoramiento vegetal, mencionó el director ejecutivo de la Asociación Mexicana de Semilleros A.C., Mario Puente.
En la AMSAC, se encuentran preocupados por esta situación, es por eso que están en busca de un desarrollo de tecnología que genere semillas que puedan resistir enfermedades y plagas durante el proceso de producción, con el fin de reducir las pérdidas en las cosechas. Además, resaltó la importancia de otra de las estrategia que buscan implementar, el cual busca que los alimentos no se “descompongan” rápidamente, Mario Puente señaló como ejemplo las innovaciones de la compañía en productos como: papas, manzanas y críticos.
De acuerdo con la AMSAC, el impacto ambiental de la pérdida y desperdicio de comida genera el 8 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero y el volumen de agua utilizado para producir esa cantidad de comida desperdiciada equivale a 3 veces el volumen del Lago Ginebra que es de 89 kilómetros cúbicos, es decir, 267 kilómetros cúbicos.